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Para la alopecia nerviosa existen tratamientos efectivos, por lo que ésta enfermedad es curable y tratable. La alopecia nerviosa es la pérdida de cabello de la cabeza a causa del estrés. La padecen tanto hombres como mujeres, y puede llegar a afectar el 70% de los folículos pilosos de la cabeza.
Cuando pasamos por situaciones estresantes, el cortisol aumenta en el organismo, lo que disminuye la actividad de los fibroblastos y queratinocitos e inhibe la síntesis de colágeno y mucopolisacáridos. Como consecuencia los debilita y el cabello comienza a caerse.
El estrés puede ocasionar tres tipos diferentes de alopecia:
* Efluvio telógeno: Al alterarse el ciclo de crecimiento del cabello se produce su caída durante un periodo corto de tiempo, de dos o tres meses. Es frecuente en mujeres jóvenes y pacientes de la tercera edad.
* Alopecia areata: El sistema inmunológico reacciona al estrés atacando a los folículos pilosos, lo que evita su crecimiento.
* Tricotilomanía: Es una alteración psicológica causada por ansiedad, que provoca que las personas se arranquen el cabello de manera compulsiva. Lo suelen sufrir las personas estresadas con sentimientos de soledad, depresión y tristeza.
Las personas que tienden más a desarrollar alopecia nerviosa son quienes sufren de ansiedad, quienes vivieron sucesos estresantes de manera reciente, personas con trastornos mentales, quienes tienen una dieta carente de vitaminas, mujeres con niveles de estrógeno bajo después del parto, y las personas que sufren de algún tipo de infección.
La alopecia nerviosa es temporal y reversible, por lo que generalmente una vez superado el episodio de ansiedad, el cabello vuelve a crecer. Cuando los niveles de ansiedad se estabilizan, el cuero cabelludo deja de verse afectado. Con excepción de las personas que sufren de enfermedades autoinmunes, como por ejemplo, la alopecia areata.
Alopecia nerviosa: tratamiento
Para tratar la alopecia nerviosa, el primer paso es acudir con un especialista para que diagnostique correctamente la enfermedad, que identifique las causas y le dé solución. Con el tratamiento médico y/o psicológico adecuado, la alopecia nerviosa es reversible.
Hay situaciones en las que la pérdida de cabello se puede terminar cuando se controlan los niveles de estrés, pero en las que esto no sucede se puede recurrir a diversos tratamientos.
Una de las mejores opciones es el tratamiento de Plasma Rico en Plaquetas (PRP), que permite la regeneración capilar gracias a la aplicación de microinyecciones en el cuero cabelludo, que reactivan el ciclo de crecimiento del cabello.
Otra alternativa para quienes la alopecia nerviosa se ha convertido en un problema crónico, es optar por un injerto capilar que les ayudará a mejorar su estado de ánimo, y a recuperar su salud física y mental.
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